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sábado, 10 de noviembre de 2007

Reflexión Nº5



Aprendiendo a leer y escribir en diferentes niveles de aprendizaje


No existe consenso sobre la edad en que los niños deben empezar a leer, sin embargo cada niño comienza con este proceso en su propio momento. Esto quiere decir que un educador debe estar preparado para enfrentarse a un grupo heterogéneo de niño en cuanto al proceso lector. Para esto es necesario, tanto seleccionar actividades de diferentes niveles, como adecuar una misma actividad para el grupo que sea adecuada y desafiante para todos los niños. Esta segunda propuesta puede sonar difícil de llevar a cabo, sin embargo en este artículo veremos que una misma actividad puede ser adecuada para los distintos niveles que presenten los niños.

Sin embargo, antes revisaremos tres tipos de estrategias de las cuales podemos desprender una misma actividad para todo el grupo a pesar de que presenten distintos niveles de aprendizaje.

La primera estrategia que presentaremos es la lectura en voz alta propuesta dentro del programa AILEM. Esta estrategia consiste en un proceso de lectura que el profesor realiza con los niños de un texto previamente seleccionado, en el cual él o ella lee el cuento con el fin de que los niños lo escuchen por placer a le lectura y a la vez favorezca el desarrollo integral de los niños (Beuchat, 1997); el educador es el modelo del cual los niños deben aprender; en esta lectura se leen diversos géneros de literatura. “A medida que el profesor lee el texto les enseña a los niños que se lee para buscar comprensión y les muestra cómo se comporta un lector experto, cuáles son los ritmos de lectura de diferentes textos, la fluidez al leer, los tonos, qué hacer frente a una equivocación o palabra desconocida, etc.” (Baeza, 2007). Dentro de esta primera estrategia resulta más fácil planificar esta misma actividad para todo el grupo, ya que lo único que requiere es que los niños realicen y respondan a preguntas y comentarios durante este proceso que debe ser interactivo, lo cual responderá a los niveles individuales de cada uno de los niños.

Por otro lado la segunda estrategia que plantearemos es la lectura compartida también presentes dentro del programa AILEM. Ésta es definida como “La lectura compartida es una estrategia para la enseñanza y el aprendizaje de la lectura, a través de la cual el profesor y los alumnos comparten la tarea de leer y aprender utilizando un texto visible para todos.” (Baeza, 2007). Esta estrategia es un poco más compleja en cuanto a utilizarla con niños de diferentes niveles, sin embargo no es imposible; durante este proceso podremos percatarnos de los niños que tienen mayor facilidad en la lectura y quienes no, ya que algunos podrán leer al mismo tiempo que lo hace la educadora mientras que otros más tímidos o que tiene mayor dificultad no lo harán. Sin embargo una de las estrategias de la lectura compartida es que debe ser releída varias veces de manera que los niños puedan saber lo que va a suceder y en futuras lecturas puedan irse incorporando paulatinamente. Por lo tanto esta es la clave para poder incorporar a todo los niños incluso que se encentren en diferentes niveles, ya que a medida que van tomando confianza irán participando de a poco.

Por último revisaremos otra de las estrategias también dentro del programa AILEM conocida como la escritura interactiva. “La escritura Interactiva es una estrategia colaborativa en la que el profesor y los niños conjuntamente, componen y escriben un texto. No sólo comparten la decisión acerca de lo que van a escribir, sino también comparten las labores de la escritura" (Swartz, Klein y Shook, 2002). Debido a que los niños son los que van a realizar la escritura en la mayoría de los casos es necesario tener mucha cautela en elegir a los niños que lo realizarán, ya que no todos tienen el mismo nivel de desarrollo en este ámbito, pero eso tampoco implica que los que estén menos avanzados debe ser dejados de lado, sino más bien la educadora debe saber cuándo pedirle que sea su turno; por ejemplo, pedirle a un niño que escriba alguna letra que ya sepa como por ejemplo la de su nombre.

Por lo tanto a través de estas estrategias pudimos dar cuenta que una misma actividad para el grupo curso puede ser adecuada para todo los niveles que presenten los niños, siempre y cuando la educadora sepa cómo realizarlo de la manera indicada.

Por otro lado como experiencia personal, he podido ver en varias clases que una misma actividad para todo el grupo tiene efectos nefastos sobre los niños con un nivel inferior, ya que no saben responder cuando les preguntan, o simplemente pasan desapercibidos debido a su nula participación. Por lo tanto las actividades grupales deben ser planificadas para que todo los niños, independiente del nivel en el cual se encuentren, puedan participar, ya sea a través de preguntas de diferentes niveles o invitándolos a participar en los minutos adecuados en que la educadora sepan que sí van a poder responder a su pregunta, reafirmando su seguridad y autoestima y ganas de participar en futuras actividades. Es por eso que a través de estas 3 estrategias se planteó que si se puede incluir a todos los niños en una misma actividad con una buna planificación acorde a todas las necesidades de los niños, independiente de los niveles de desarrollo que se encuentren.








Bibliografía:
  • ESTRATEGIAS DE ENSEÑANZA DEL PROGRAMA AILEM-UC ESCRITURA INTERACTIVA
    Paz Baeza Bischoffshausen
    María Cristina Solís
    Emy Suzuki Sone
    Tonia Razmilic Burgos
  • ESTRATEGIAS DE ENSEÑANZA DEL PROGRAMA AILEM-UC LECTURA EN VOZ ALTA
    Paz Baeza Bischoffshausen
    Tonia Razmilic Burgos
  • ESTRATEGIAS DE ENSEÑANZA DEL PROGRAMA AILEM-UC LECTURA COMPARTIDA
    Paz Baeza Bischoffshausen
    María Cristina Solís
    Tonia Razmilic Burgos

martes, 25 de septiembre de 2007

Reflexión Nº4


El sonido del habla (la conciencia fonológica).


En dicha reflexion se pretende abordar la importancia de desarrollar la conciencia fonológica en los niños debido a que dichas habilidades son predictoras del éxito del aprendizaje inicial de la lectura (Defior). A la vez, este mismo autor nos porpone que existen otro tipo de implicaciones como que el aprendizaje de la lectura y de la escritura en un sistema alfabético, contribuye al desarrollo de las habilidades fonológicas, por lo que buscamos promover dicha habilidad de diversas formas.

Entre otras cosas, las diferencias socioeconómicas entre los niños, generaran diferencias neuropsicológicas, las cuales están determinadas por la calidad y la interacción con su medio sociocultural y familiar. Debido a esto la labor llevada a cabo por un educador en esta etapa es crucial. Estas experincias adquiridas en esta son conocidas como el umbral lector, lo cual se refiere al conjunto de habilidades y procesos cognitivos y lingüísticos con los cuales el niño inicia su aprendizaje formal de la lectura.

Como educadoras es fundamental tener claro el concepto y la relevancia que tiene para nuestro trabajo el tener conciencia de lo que es el umbral lector, ya que a partir de él es que nosotros seguiremos trabajando con el niño en su proceso de enseñanza de la lectura, estimulandolo y dándole las herramientas necesarias para un buen desarrollo lector, o de lo contrario detectar los problemas lo antes posible, ya que debemos tener en cuenta que el problema afectara en el rendimiento futuro del niño en su ambiente escolar.De ahí que como educadoras actuemos como mediadores junto con los padres en este proceso que es tan importante en el desarrollo de los niños.

Por último, debemos mencionar que una de las herramientas para trabajar la lectura es favorecer el desarrollo la conciencia fonológica, por lo que a continuación presentamosalgunas estrategias metodológicas que Silvia Defior propone como importantes a desarrollar con los niños desde la etapa preescolar:


"1.- Duración acústica ¿Qué palabra es más larga?
2.- Identificación de palabras ¿Cuántas palabras hay en...?
3.- Reconocimiento de unidades ¿Se oye una /f/ en café?
4.- Rimas ¿Riman col y gol?
5.- Clasificación de palabras ¿Empieza foca igual que forro?
6.- Combinar unidades ¿Qué palabra es /s/,/o/,/l/?
7.- Aislar unidades ¿Cúal es el primer sonido de la palabra barro?
8.- Contar unidades ¿Cuántos sonidos oyes en sol?
9.- Descomponer en unidades ¿Qué sonidos oyes en la palabra baño?
10.- Añadir unidades ¿Qué palabra resultará si le añadimos /s/ a alto?
11.- Sustituir unidades ¿Qué palabra resulta si cambiamos la /k/ de col por /g/?
12.- Suprimir unidades ¿Qué palabra queda si quitamos /r/ a rosa?
13.- Especificar la unidad suprimida ¿Qué sonido oyes en caro que no está en aro?
14.- Invertir unidades ¿Qué palabra resultará si digo sol al revés?
15.- Escritura inventada Dictado de palabras

Junto con esto:
-Es necesario introducir los tipos de tarea en función de su complejidad y
de acuerdo con la edad de los niños. Por ejemplo, Olofsson y Lundberg (1983),
en su programa de entrenamiento, utilizan el siguiente orden:
1. Reconocimiento de rimas, ritmo, versos sin sentido.
2. Segmentación de las palabras en sus sílabas.
3. Identificación de los fonemas iniciales de las palabras. Discusiones metalingüísticas
sobre los sonidos que componen el lenguaje.
4. Estudiar el efecto de añadir u omitir los fonemas iniciales de las palabras.
5. Segmentar las palabras en sus fonemas, con palabras de dos fonemas.
6. Segmentar las palabras en sus fonemas. Palabras de tres fonemas.
7. Sintetizar o combinar fonemas para formar palabras.

- Es necesario utilizar todo tipo de recursos lúdicos para que las tareas sean
motivadoras y se mantenga la atención de los niños. Por ejemplo:
. juegos lingüísticos,
. tren de palabras,
. canciones cambiando una letra de las palabras o anulando una palabra,
. trabalenguas,
. juegos con familias de palabras,
. poesías, rimas,
. lenguajes secretos de diversos tipos; contraseñas,
. hablar como los robots,
. etc.


Bibliografía:


  • Una clasificación de las tareas utilizadas en la evaluación de las habilidades fonológicas y algunas ideas para su mejora. SYLVIA DEFIOR


  • La CONCIENCIA FONOLOGICA COMO UNA ZONA DE DESARROLLO PROXIMO PARA EL APRENDIZAJE INICIAL DE LA LECTURA; LUIS BRAVO

martes, 28 de agosto de 2007

Reflexión nº 3

Reconocer nuestro entorno

Hace un par de años atrás a los niños pequeños no se les ensañaba a leer y a escribir hasta entrar a los primeros años de enseñanza básica. Si se escuchaba a un niño “leer” o decir una palabra al mismo tiempo que señalaba un cartel en la calle los adultos quedaban sorprendidos, pero no tomaban acciones más allá que pudieran potenciar esta habilidad que los niños presentaban a tan corta edad, sino que simplemente se les dejaba esta tarea para los cursos de enseñanza básica posteriores. Sin embargo las investigaciones de hoy en día demuestran que hay que promover la lectura y escritura de los niños antes de los 6 años.
En los tiempos de hoy gracias a los medios de comunicación, tanto escritos como audiovisuales, han hecho que el niño esté en mayor contacto con el mundo letrado, debido a que constantemente ven comerciales y reconocen los logotipos que luego irán nombrando a medida que los ven en diferentes lugares de su medio (revistar, carteles, etc). A esto los investigadores lo llaman “Environmental Print Awareness”, lo cual es muy mencionado por varios autores (ver entre otros autores citados en la bibliografía presentada posteriormente) como habilidad a potenciar en niños preescolares. Sin embargo las investigaciones no han demostrado una directa relación entre la habilidad de lectura de logos o la imprenta del entorno con la habilidad de lecturas posteriores; lo que quiere decir que no necesariamente un niño que lee logos va a tener mayor éxito en aprender a leer, o viceversa. El valor del reconocimiento del entorno es que los niños están comenzando a entender que la impresión significa algo y que intentan entender el mundo que los rodea. Este tipo de lectura es considerando como lectura emergente.

El estudio de las lecturas de ambientes no es reciente, sino que viene ya desde los años 60 y 70, por que lo no es un tema nuevo, sino que simplemente ha estado teniendo más importancia hace algunos años. Como ya mencionamos anteriormente este necesidad innata en que el niño desea comprender el mundo que lo rodea es fundamental de potenciar y no esperar hasta años posteriores para desarrollarlo; existen varias formas de hacerlo y no es necesario ser un profesional de la educación para promover esta lectura, sino que también los padres u otros cuidadores pueden hacerlo a diario. A continuación presentamos una serie de ejemplos de cómo trabajar esto día a día, pero antes debemos tener en claro que la lectura emergente de logotipos en el entorno no es lo mismo que la lectura gráfica del abecedario, por lo que se propone a continuación dista mucho a prácticas como sentarse con el niño a enseñarle el abecedario, sin contexto o motivación alguna.

-Considerando que este tipo de lectura se da según el contexto en que se viva por lo que hay que tener en cuenta que los logos de otros contextos quizás no son significativos para los niños. Los logotipo que los niños reconocen están ligados al contexto propio en que el niño está inserto y ser significativos.
-Aprovechar el medio que nos rodea saliendo hacer paseos en donde se reconozca lo escrito. -Comentar con los niños cual es la forma, función que cumplen y lo que significa el logo.
-Estimular la lectura de cualquier tipo.
-Cuando el niño demuestre interés por este tipo de lectura incentivarlo y ampliar sus posibilidades de lectura.
-Recolectar logos (significativos y contextualizados) y realizar juegos con ellos.
Es necesario mencionar que el desarrollo de esta habilidad se da en culturas letradas.

Bibliografía
Emergent Literacy and Oral Language Development
Debra Stevens Peterson. Barbara M. Taylor. Ruth Hansen.

Environmental Print Awareness in Young Children
Danielle Z. Kassow

martes, 21 de agosto de 2007

Reflexión 2


Aprendamos a disfrutar el escuchar...


El mundo acelerado de hoy no nos damos el tiempo para tomar un descanso y poder sentarnos un rato simplemente a relajarnos y disfrutar de nuestro entorno. Nos vemos tan agobiados por la cantidad de deberes que debemos atender que simplemente pasamos en alto los minutos de relajo al aire libre que podríamos aprovechar… La cuidad nos agobia con su incesante movimiento y con su constante contaminación (tanto acústica como medio ambiental); su ritmo acelerado nos lleva a envolvernos en él sin darnos cuenta cayendo en la rutina diaria sin poder hacer un quiebre y para poder relajarnos y descansar.
Pero a pesar de estar envueltos en esta voraz cuidad aún existe el tiempo libre y las áreas verdes a las cuales podemos acudir a respirar. El problema es poder aprovechar este tiempo para realmente tomarse un relajo y no caer en encerrarse en la casa a mirar el televisor. Un tiempo al aire libre, ya sea en el parque o fuera de la ciudad, es al parecer la dosis de relajo que debemos incorporar para producir un quiebre en nuestra rutina.
¿Cuándo fue la última vez en que se acostaron en un parque simplemente a disfrutar del paisaje, sin pensar en las tareas que debemos realizar, y escuchar a los pájaros cantar? ¿Cuándo fue la última vez que disfrutaron el pasear por las calles escuchando buena música, por el simple gusto de escuchar? Muchas veces las cosas tan pequeñas como el detenerse a disfrutar y escuchar se nos olvida dentro de nuestra rutina y no vemos el beneficio que esta simple acción nos puede traer a nuestras vidas. Todos necesitamos de un minuto de relajo, en el cual seamos capas de olvidar la rutina y acordarnos de cuáles son nuestros pasatiempos para volver a retomar; necesitamos un tiempo en el cual podamos deleitarnos con las cosas simples que nos ofrece la vida como es el hecho de escuchar.
Muchos autores hacen referencia a la importancia que tiene escuchar (Beuchat (2001), Madaule, entre otros) y de todas las implicancias que esto trae. Paul Madaule, en su artículo “La música una invitación a escuchar, al lenguaje y al aprendizaje”, menciona la importancia que tiene el escuchar música vital en el proceso de aprendizaje y a la vez el rol de deleite que dicho proceso debe conllevar. El proceso fisiológico de escuchar permite que el niño perciba los sonidos de forma organizada, lo cual es en otras palabras escuchar; Madaule propone que “la música prepara al oído, la voz y el cuerpo del niño a escuchar, integrar y emitir sonidos del lenguaje”. Es por esto que el adulto debe darse el tiempo para realizar acciones tan simples como escuchar para así poder transmitirlo a las futuras generaciones y así aprovechar los beneficios que esto trae.
El saber escuchar es algo que consideramos vital para poder relacionarnos con otras personas, sin embargo, según Beuchat (2001) las investigaciones recientes demuestran que el 80% de las personas tiene dificultades para escuchar con atención y respetar las opiniones ajenas, siendo que saber escuchar es una “cualidad altamente valorada en la sociedad, ya que permite establecer buenas relaciones personales y sociales” (Beuchat, 2001).
Según este mismo autor existen 4 formas diferentes de escuchar*: el escuchar atencional (que es para obtener información, como por ejemplo obtener un mensaje); el escuchar analítico (lo cual consiste en analizar lo escuchado para resolver algo como por ejemplo discriminar algún sonido); el escuchar apreciativo (el cual es el de deleite y goce, como por ejemplo escuchar una canción), al cual nos hemos venido refiriendo en esta reflexión; y el escuchar marginal (el cual consiste en captar otros estímulos además del foco de atención, como por ejemplo el leer y escuchar música). Estas 4 formas a nivel educativo son cruciales de desarrollar y se deben disponer de los espacios adecuados para favorecerlos. Este mismo autor nos plantea que “existe una importante vinculación entre escuchar y el aprendizaje de la lectura… y la capacidad de escuchar comprensivamente beneficiaría las habilidades lectoras.” Además menciona que el escuchar apreciativo es el que menos recurrencia tiene a nivel educativo, y que a mi parecer, es el primordial que se debe desarrollar para poder alcanzar los otros.
Es por esto que hago un llamado a reflexionar acerca de la importancia que tiene el escuchar y de generar este hábito desde nosotros mismos para así poder promoverlo con las otras personas y en lo posible en las futuras generaciones, para así poder crear un mejor ambiente en donde la gente se tome el tiempo de escucharse a sí mismo, a las otras personas y al entorno que lo rodea. Se hace un llamado a tomar un tiempo de descanso para deleitarnos a escuchar, ya sea una simple melodía o el cantar de los pájaros al andar.

Paulina Calvo Gómez.
21 de agosto de 2007

*Para más información de cómo enseñar y potenciar el escuchar se invita a revisar la bibliografía presentada a continuación.

Bibliografía.
· LA MUSICA UNA INVITACIÓN A ESCUCHAR, AL LENGUAJE Y AL APRENDIZAJE. P. Madaule
· ESCUCHAR UAN HABILIDAD QUE ES NECESARIO DE ENSEÑAR. C. Beuchat.
· JUEGOS VERBALES. Condemarín.
· DESARROLLO DEL ESCUCHAR Y DEL LENGUAJE ORAL EN NB1: ALGUNAS CONSIDERACIONES METODOLÓGICAS. P. Baeza, M. Solís
· CÓMO DESARROLLAR EL LENGUAJE EN SU HIJO. The daily parent. Boletín informativo para padres que trabajan

lunes, 6 de agosto de 2007

Reflexión bibliográfica nº1

La importancia de la contextualización para la alfabetización inicial,
y el labor de los educadores.


Hoy en día existe un basto número de investigaciones que avalan la labor de las educadoras de párvulos para estimular precozmente habilidades que llevarán al niño a desarrollarse adecuadamente en los años de enseñanza básica en sus años posteriores (Bravo, 2004).
Sin embargo, por otro lado, cada año las diferentes pruebas de medición (SIMCE, PSU, etc.) arrojan cifras alarmantes acerca del bajo desempeño que los niños chilenos presentan; más aun cuando se dice que mucho de ellos no entienden lo que leen; es decir, que saben leer (saben decodificar los símbolos), pero entienden el significado de lo que leyeron.
Según lo anteriormente expuesto se puede cuestionar muchas cosas acerca del desempeño que ha tenido el sistema educativo para llegar a esta situación, sin embargo no es necesario remontarse hasta muchos años atrás en donde se utilizaban antiguas metodologías para enseñar a leer y escribir, pero de una forma, al parecer, mecánica. Uno se llega a pregunta si esto tiene sentido, ya que si se sabe decodificar ciertos símbolos de qué sirve si no se saben aplicar.
Según Taberosky, uno de los ingredientes que se debe tener en cuenta para lograr el éxito en la alfabetización inicial, es la contextualización; es decir ver en qué circunstancias y bajo qué necesidades necesitamos desarrollar la lectura o escritura, ya sea de números o palabras.
Los niños presentan gran interés por aprender a leer a tempranas edades, sin embargo en muchas situaciones esta necesidad de los niños por leer, o simplemente la espontaneidad que en ellos aflora, no es tomada en cuenta, cometiendo un grave delito al pasar por alto esto que surge en los niños casi de manera espontánea. Rosko (2003), Bravo (2004) y Taberosky entre otros autores nos plantean la importancia que tiene la alfabetización emergente o alfabetización inicial, como lo llaman otros (Baesa, 2007), en los primeros años de vida y demostrándonos las primeras aproximaciones de los niños al mundo letrado y planteándonos a la vez diversas formas de trabajar para estimular la lectoescritura; todos ellos teniendo en cuenta el contexto en el cual se debe desarrollar. No tiene sentido para un niño aprender un extenso vocabulario si este no está en relación a las necesidades suya ni al contexto que lo rodea; muy distinto sería decirle a un niño que elaborara una lista con las frutas que se pueden utilizar para hacer un “tuti-fruti” las cuales irá a comprar con su madre, a enseñarle todas las frutas de manera aislada y sin relación alguna. La contextualización y aplicación de lo aprendido es lo primordial para lograr que el aprendizaje del niño sea significativo.
Gracias a los medios de comunicación los niños se ven rápidamente expuestos y se van introduciendo al mundo letrado y a la vez sus ganas de seguir aprendiendo pueden ser infinitas. La pregunta es cómo saber aprovechar esta situación y saber detectarla para poder sacar ventaja de esto.
Rosko (2003) y Baesa (2007) nos presentan estrategias claras de cómo trabajar la alfabetización inicial, así como Taberosky nos presenta las etapas que los niños pasan para llegar a leer. A la vez existen varios estudios como los presentados por Bravo (2004) que avalan dicha labor, por lo que es trabajo de las educadoras de párvulos poner en marcha esto.
Si bien es necesario tener al apoyo de la institución en que se trabaja para poder desarrollar estas actividades, está en las manos de la educadora el llevar a cabo dichas actividades. Podemos señalar que si bien esta información es reciente (aunque se viene desarrollando hace un par de décadas) dichos fundamentos y estrategias deberían estar utilizándose ya en las aulas, ya que es necesario que un educador esté en constante formación y actualización.
Asimismo es necesario recalcar que las estrategias utilizadas tienen un fundamento que las avalan y de los cuales las educadoras deberían estar en conocimiento de ellas para que así sean más significativas tanto para ellas como para los niños, ya que ellas sabrán identificar la importancia que tiene la lectoescritura para los niños y su incidencia en años futuros.
Bibliografía.
  • Baeza B., Paz; "¿Qué se entiende hoy por alfabetización inicial?"; (2007).
  • Bravo V., Luis; "La alfabetización inicial un factor clave del rendimiento lector"; (2004).
  • Rosko A., Kathleen; "The essentials of early literacy instruction"; (2003).
  • Tberosky, Ana; "Alfabetización inicial: aportes y limitaciones"